viernes, 5 de noviembre de 2010

HÁBITOS DE HIGIENE DE LAS PERSONAS


Como toda costumbre saludable, es importante que los niños aprendan hábitos de higiene desde pequeños para cuidar su salud. La higiene personal no solo es esencial para mantenernos saludables y mejorar nuestra calidad de vida sino que es una forma de respetar a quienes nos rodean. ¿A quién le gusta estar cerca de una persona sucia y que huele mal? ¡A nadie!
Cosas tan básicas como lavarse las manos con jabón antes de ir a comer o cambiarse de prendas con frecuencia son hábitos que los más pequeños tienen que aprender. Por estas razones, te enseñamos hábitos de higiene para niños.
Manos. Un hábito de higiene esencial es que los más chicos aprendan a lavar sus manos cuando llegan a casa y antes de comer. También si han estado jugando afuera y por supuesto si han tocado juguetes sucios.
Transpiración. Si bien el olor corporal de la sudoración comienza en la pubertad, los niños también transpiran. Por eso es importante mantener la higiene de su cuerpo usando desodorantes, pero sobre todo a través del baño.
Ropa. Si los niños transpiran, entonces sus prendas podrán mancharse por el sudor. Obviamente, la ropa también se ensucia por el uso frecuente, así que procura que los niños cambien sus prendas. Especialmente con la ropa interior que, al estar en contacto con la piel, recoge las células muertas. Si los niños viven en un ambiente con fumadores deben lavar su ropa más a menudo, pues el humo y el del cigarrillo queda impregnado en ellas.
Zapatos. También los pies transpiran y desprenden un olor desagradable debido al contacto del sudor con la tela húmeda. Si los niños usan zapatos en el uniforme del colegio, procura que se los quiten y los ventilen cuando llegan a casa. Intenta que varíen sus zapatos. Otro aspecto importante de la higiene en los pies es mantener los zapatos limpios y lustrados: se ven mejor, duran más y se vuelven menos propensos a oler.
Pies. Es fundamental que higienicen sus pies al menos una vez al día y que los sequen correctamente para evitar la acumulación de bacterias. Si van a la piscina del club, es esencial que usen ojotas para evitar una infección de hongos.
Cabello. El cuero cabelludo tiene glándulas sudoríparas. Si no lo lavamos todos o casi todos los días, suda y acumula aceite y células muertas de la piel. El cabello grasiento no solo es desagradable a la vista sino también un signo visible de falta de higiene. Para tener el pelo saludable, procura que los niños lo laven con shampoo masajeando bien su cabeza y enjuaguen con agua limpia. Para las niñas con cabello largo, también usen acondicionador para ayudar a tener el pelo más liso y desenredado.
Dientes. La higiene bucal se logra cepillando adecuadamente los dientes después de cada comida. Dado que a los más pequeños les encantan las golosinas, es importante enseñarles el hábito de cuidar sus dientes.

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